Quiero ser trader
Hemos tomado una decisión. Queremos ser traders.
Pero el camino que emprendemos no será fácil ni corto. Requiere de una constancia, una determinación y un compromiso importante.
Hay unos conocimientos previos a adquirir, un desarrollo de ser capaces de leer el mercado y un gran trabajo psicológico de gestión de las emociones al operar.
No es tarea de un mes ni de obtener un sistema mágico. Es un trabajo de construcción de uno mismo, de aprendizaje y de un cambio de mentalidad, sí, porque el trading requiere de otra mente que llevamos muy de serie desde la infancia: no nos sentimos cómodos con la incertidumbre y no nos gusta perder.
Y el trading lleva implícito ambas cosas. Operamos en los mercados financieros en un marco de incertidumbre, cada operación es impredecible y hay pérdidas, son el coste de producción del Trader, eso sí, hay que saber gestionarlas.
Pero con un sistema adecuado, que hemos de construirnos nosotros mismos, tendremos una ventaja probabilística y con una muestra “n”, ganaremos dinero de forma regular.
Y nuestra mente ha de aceptar esto y tener la disciplina necesaria para ejecutar ese sistema, sin que el miedo a perder, el ego, la avaricia, … se interpongan. No podemos eliminar nuestras emociones, pero sí controlarlas.
Antes de empezar en este mundo, hemos de tomar conciencia de algo importante: el Trading es como un negocio cualquiera. Hay que tener en cuenta diversos aspectos antes de iniciarse en él:
- Formación.
- Equipo informático.
- Capital disponible para vivir mientras dure el proceso (calcular unos 2 años, mínimo).
- Disponibilidad.
- Otros aspectos que se irán desarrollando durante el proceso, como el tipo de operativa a realizar.
¿Estás preparado para iniciar este camino? ¡¡¡Adelante!!!
Equipo informático necesario
Mientras estamos en la fase más formativa, con un ordenador portátil es suficiente.
Cuando empezamos con la operativa en simulado, yo recomiendo tener un segundo monitor. ¿Por qué? Porque antes de realizar nuestra operativa, hemos de analizar los marcos temporales superiores y tenerlos a la vista mientras operamos, es de utilidad. Porque un trader puede necesitar de información financiera y otro monitor nos puede ayudar a tenerlo siempre monitorizado.
Pero, que nadie se asuste. Es posible operar solo con un ordenador portátil.
Plataformas para la operativa
Yo, en base a mi experiencia, recomiendo dos plataformas:
- Ninja Trader: para una operativa con futuros o Forex más del tipo intradía es muy adecuada. Puedes realizar una operativa en simulado y luego abrir cuenta con un bróker para operar en real.
- ProrealTime: plataforma muy buena para aprender durante esta etapa formativa. Si se escoge una operativa tipo swing, es una plataforma muy adecuada. Hay un par de brókeres que trabajan con ella.
¿Necesito tener mucho dinero ahorrado para poder operar?
Cuando empezamos, yo recomiendo, si operamos con futuros, hacerlos con los micro, hasta llegar a la consistencia. Con lo que con un capital de unos 5.000 $, es suficiente.
Si hacemos swing, podemos operar con CFD’s, que nos permite elegir el apalancamiento más conveniente.
También, hoy en día, tenemos a nuestra disposición las cuentas financiadas, que nos permitirán, si nos las merecemos, capital para operar bajo unas condiciones determinadas. Te invito a que consultes dos de ellas, las más fiables:
Topstep Trader y OneUp Trader
¿Qué es el análisis técnico?
Es el estudio de los movimientos del mercado mediante el uso de gráficos con el propósito de pronosticar las futuras tendencias de los precios.
Los gráficos son las herramientas de trabajo de los analistas técnicos.
Los 3 tipos de gráficos más importantes son:
A.- Gráficos de Línea: son gráficos muy simples donde una línea une los precios de cierre. Nos ofrecen información sobre dos variables, el tiempo y el precio y son útiles para el estudio de gráficos a largo plazo.
B.- Gráficos de barras: cada barra es la representación de un conjunto de ticks. Por ejemplo, en una barra de 5 min., la barra registrará todos los ticks que ocurren dentro de esos 5 minutos.
La parte más alta de las barras representa el máximo, la parte más baja el mínimo, una pequeña muesca a la derecha de la barra muestra el precio de cierre y una pequeña muesca a la izquierda de la barra muestra el precio de apertura. Denominamos rango de la barra a la diferencia entre el máximo y el mínimo, esto es, a la longitud de la barra.
C.- Candlesticks o velas japonesas: los gráficos candlesticks se desarrollaron en Japón. Su desarrollo en el mundo occidental se produjo gracias a Steve Nison. En su construcción destaca un rectángulo interior denominado cuerpo real que se construye mediante la diferencia entre los precios de apertura y de cierre. Si el precio de cierre es superior al de apertura el cuerpo real será blanco y si es inferior será negro. Las líneas que sobresalen del cuerpo real, se denominan sombras y denominamos sombra superior a la que está en la parte alta de la figura, es decir, entre el cuerpo real y la parte alta del rango de la sesión y sombra inferior a la que está en la parte inferior.
Hay un cuarto tipo de gráfico, que quiero destacar: el gráfico Heiken Ashi.
Se trata de una herramienta muy útil para seguir la tendencia de los mercados y es muy adecuado de consultar en una operativa más tipo swing.
Su objetivo es hacer que la tendencia sea mucho más visual que con el gráfico de velas japonesas, ya que lo suaviza y elimina la necesidad de interpretar patrones.
Fijaros en las diferencias y en cómo queda más visual y nítida la tendencia:
Gráfico en velas japonesas:
Gráfico con velas Heiken Ashi:
Activos subyacentes y derivados
Los productos derivados son instrumentos financieros cuyo valor deriva de la evolución de los precios de otro activo, denominado “activo subyacente”.
El activo subyacente puede ser muy variado: una acción, una cesta de acciones, un valor de renta fija, una divisa, materias primas, tipos de interés…
Básicamente, un derivado es una contratación a plazo en la que se establecen todos los detalles en el momento del acuerdo, mientras que el intercambio efectivo se produce en un momento futuro.
Son productos sujetos al efecto apalancamiento, ya que la inversión inicial necesaria es reducida en comparación con la exposición al subyacente que se obtiene, por lo que los resultados pueden multiplicarse, tanto en sentido positivo como negativo, en relación con el efectivo desembolsado. Por lo tanto, son productos de riesgo elevado.
Los derivados se pueden negociar en mercados organizados o no organizados.
Principalmente podemos encontrar los siguientes tipos de productos derivados:
- Futuros: es un contrato por el que se acuerda el intercambio de una cantidad concreta de activo subyacente (valores, índices, productos agrícolas, materias primas…) en una fecha futura predeterminada, a un precio convenido de antemano.
- Opciones: es un contrato que implica un derecho para el comprador y una obligación para el vendedor, a comprar (o vender) una determinada cuantía del activo subyacente en un plazo estipulado a un precio convenido de antemano (precio de ejercicio).
- Warrants: un warrant es un producto negociable que incorpora el derecho de comprar o vender un activo (subyacente) a un precio de ejercicio y para un plazo determinado.
- Certificados: son valores que replican un activo subyacente y su evolución, dando derecho a recibir un determinado importe sobre el nominal del certificado en función de la variación del subyacente. Este activo puede ser un índice bursátil, una cesta de acciones, divisas o materias primas. Son emitidos por entidades financieras.
- CFD: los contratos por diferencias (Contracts for Difference) son contratos en los que un inversor y una entidad financiera acuerdan intercambiarse la diferencia entre el precio de compra y el precio de venta de un determinado activo subyacente.
Son productos no estandarizados por lo que el inversor debe considerar las posibles particularidades y riesgos específicos que pudieran presentar en cada caso (negociación de forma bilateral, cotización fuera de mercados regulados, riesgo de contraparte, …)
Además, se trata de productos apalancados con alto riesgo, que pueden ocasionar pérdidas superiores al capital inicial desembolsado.
No se negocian en un mercado secundario oficial. Se negocian en las plataformas electrónicas establecidas por la entidad financiera que los emite.
Fundamentos lógicos del análisis técnico:
- Los movimientos del mercado lo descuentan todo: Cualquier cosa que pueda afectar al precio, ya está reflejado en él.
- Los precios se mueven por tendencias: es el propósito de la representación gráfica de los movimientos de precios de un mercado.
- La historia se repite: este fundamento está relacionado con la psicología humana. Los precios no se mueven solos, detrás hay personas con todo lo que ello implica. Y los patrones que el precio va formando, no son más que el reflejo de la conducta humana, de sus emociones y de las decisiones que toman. Y dichos patrones, se van viendo de forma repetida en todos los gráficos, en todos los marcos temporales a lo largo de la historia.
¿Quién fue Charles Dow?
Dow fue periodista especializado en información financiera y, junto a su socio Edward Jones fundaron la Dow Jones & Company en 1882, fundadora del periódico The Wall Street Journal.
En 1884, Dow publicó su primera versión de un índice de acciones y en 1887, comenzó a publicar dos índices, uno centrado en la industria (DJIA) y otro en las compañías de ferrocarriles (DJRA).
Para Dow, estas medias sólo eran un barómetro de la actividad económica general y no un método para predecir los movimientos bursátiles.
Estos dos índices junto con la teoría de Dow constituyen la base teórica del análisis técnico.
El objetivo de su teoría era determinar la tendencia primaria del mercado y está centrada en su dirección, sin entrar en su duración o tamaño.
Principios básicos de la Teoría de Dow:
1.- Las medias lo descuentan todo.
2.- El mercado tiene tres tendencias.
3.- Las tendencias principales tienen tres fases.
4.- Las medias deben confirmarse entre ellas.
5.- El volumen debe confirmar la tendencia.
6.- Se presume que una tendencia está en vigor hasta que da señales definitivas de que ha retrocedido.