En el artículo de hoy os voy a contar mi experiencia reciente en donde disputé una carrera de ultrafondo y las similitudes que yo encuentro con el proceso de adquirir la consistencia en el trading.

En este evento y de forma resumida, se trataba de correr durante 12 horas dando vueltas a una pista de atletismo con el objetivo de acumular el número máximo de kilómetros que uno pueda y obviamente, ganando el que hace más.

Más allá del físico, ¿Cómo se afronta mentalmente 12 horas dando vueltas a un circuito? ¿Cómo empezar e ir avanzando minuto a minuto con la mente puesta en que te quedan un montón de horas por delante haciendo lo mismo, correr y correr y con el mismo paisaje?

¿Es fácil conseguir un reto así con ese enfoque de tan largo plazo? ¿no sería mejor ayudar al coco para que la motivación y la ilusión no se pierdan en tan largo camino?

Pues sí y eso es lo que hice, establecer una estrategia para ayudarme a que tal hazaña fuera más fácil, disfrutara más y tuviera más probabilidades de conseguir terminar.

Lo primero que me planteé fue dividir la carrera en 4 pequeñas carreras de 3 horas. Con ello conseguía programar mi mente a tener un enfoque de medio plazo (3 horas) con lo que la carga mental era menor. No pensaba en 12 horas, solo en 3.

Debía terminar la primera, luego la segunda y así sucesivamente todas las carreras de 3 horas, no había un más allá de ese tiempo.

Lo segundo que me establecí dentro de mi planificación era que cuando terminara cada carrera de 3 horas, me regalaría un pequeño premio. Evidentemente era un regalo en el contexto de estar participando en una prueba. La idea era regalarme unos 10 minutos para refrescarme en mi puesto de avituallamiento, dar alguna vuelta andando, comer algo más sólido y que me apeteciera… En definitiva, reconocerme que había terminado una pequeña carrera y coger aire fresco antes de enfrentarme al siguiente bloque de 3 horas.

¿Qué conseguía con esa división del reto en 4 partes? Mantenerme motivada e ilusionada por alcanzar una meta intermedia que me permitía, por una parte, estar más cerca de mi objetivo final de terminar las 12 horas y además, venía con un regalo (andar, comer…) con lo que el terminar aún me ilusionaba más. Al empezar el siguiente bloque de 3 horas me encontraba como más fresca, más orgullosa, más sólida y motivada para empezar de nuevo y avanzar con la mente puesta en otra carrera de 3 horas.

Si desde el principio de la prueba, la hubiera enfocado como una carrera de 12 horas sin metas parciales, ni «regalos», el solo hecho de tener por delante un reto tan grande y largo, se me hubiera hecho infinitamente más costoso y quizá hubiera obtenido un peor resultado, si es que hubiera terminado.

¿Qué conclusión podemos sacar de un aprendizaje de este tipo y que podamos aplicar al trading?

En primer lugar, aclarar para el que no lo sepa, que conseguir resultados en este oficio es un proceso largo y muy duro. Se necesitan años y una gran resistencia mental para levantarse después de infinitas caídas. Vamos, que hay que estar predispuesto a terminar con las rodillas bien peladas después de ver el suelo muy cerca y muchas veces.

Es un reto a largo plazo, muy duro y por ello, al igual que una carrera de ultrafondo, resulta muy aconsejable establecerse metas parciales.

Sabemos que todo tiene una evolución: conocer el movimiento del precio, aprender un método (sistema de trading), ponerlo en práctica y que, evidentemente una cosa tiene que ir después de la otra.

Pero ello que parece obvio, en la realidad puede ser complicado de llevarlo a la práctica por un motivo: las ganas de conseguir resultados rápidos.

Estas prisas nos hacen en más de una ocasión querer saltarnos etapas y esto solo nos llevará a la casilla de salida repetidamente.

Pero aun queriendo hacer las cosas bien e ir avanzando lentamente y de forma progresiva, un reto tan grande y que requiere años no se puede afrontar como un todo. Necesita también de ser fraccionado en metas parciales estableciendo unos tiempos determinados que se irán revisando de forma periódica y reevaluando si fuera necesario.

Por ejemplo, en el primer acercamiento al trading, podemos dejarnos el tiempo de 6 meses/1 año en aprender conceptos de análisis técnico, comprender el movimiento del precio, sus estructuras, sus Zonas de Alta Probabilidad… y coger la habilidad de realizar buenas lecturas de precio e identificar oportunidades de trading.

Todo ello puede dividirse en 3 etapas de x meses: adquirir conocimientos básicos, lectura de precio y detección de oportunidades.

En cada una de ellas, podemos hacer una revisión de su evolución cada 30 días para valorar su buena marcha, lo que se ha aprendido y lo que falta trabajar para verificar que se avanza a buen ritmo y de forma sólida para llegar a los tiempos establecidos con el objetivo parcial conseguido.

Y cuando termines una de esas etapas y te des tu aprobación, tómate un descanso y date un premio. Elige algo que te haga especial ilusión y hazlo. Pon en evidencia (a ti mismo) que has hecho las cosas bien, que has trabajado bien y que tienes tu recompensa por ello. Date un respiro y un regalo para darte motivación, ilusión y ganas de seguir adelante y a por todas en la siguiente etapa.

Y algo muy importante y que muchas veces se nos olvida. Seamos conscientes de lo que vamos consiguiendo. A veces nos exigimos tanto que solo miramos hacia adelante y no vemos más que el largo camino que nos queda por recorrer. Pero es necesario también valorarnos, mirar atrás y darse cuenta de lo que uno ha avanzado en un determinado espacio de tiempo (o desde los inicios) porque solo tú sabes lo que te ha costado cada paso que has dado (en energía, tiempo y dinero) y eso lo vale todo.

WhatsApp
El Espejo del Trader Reviews with ekomi.es